Cuando hablamos de terapia psicológica, todo el mundo piensa en acudir a una consulta. Es fácil que cuando se plantea la opción de hacerlo de modo virtual, la gente tenga ciertas reticencias.

A lo largo de este artículo, vamos a hablar de qué es la terapia online, cómo se hace y sus  ventajas y desventajas.

 

¿Qué es y cómo se hace? 

La terapia online es la que se hace de modo virtual, es decir, por videoconferencia. Psicólogo/a y paciente no estarán en el mismo espacio físico, pero sí tendrán una comunicación en tiempo real.

 

Entorno

El hecho de que la persona que acuda a terapia esté en su propio domicilio, puede ser favorable para el/la profesional de la psicología, ya que podrá ver a la persona en su propio entorno. Cuando estamos en consulta, a veces se crea un entorno algo artificial que puede tener como beneficio que la persona lo asocie a un entorno seguro en el que puede hablar de lo que quiera sin problemas pero, el hacer esto desde casa, puede llegar a condicionar también el propio domicilio como ese lugar en el que nos podemos sentir bien.

Otra de las ventajas en el caso de la terapia online es la presencia de mascotas. Si una persona tiene una mascota que le ayuda a sentirse mejor, no habrá ningún problema con la presencia de la misma durante las sesiones, aunque siempre dependerá del caso.

Por contra, pueden aparecer algunos problemas como el hecho de que la persona no viva sola y sienta cierta reticencia a la hora de contar sus problemas por si hay alguien escuchando o la imposibilidad de controlar aspectos como el ruido de alrededor.

 

Accesibilidad 

Para personas que no están acostumbradas al uso de las nuevas tecnologías, acceder a un servicio virtual puede ser un problema. Por contra, el hecho de poder hacer terapia desde cualquier lugar, aporta ventajas a quienes se desplazan constantemente por cuestiones laborales, por ejemplo, o para quienes viven en zonas donde el acceso a terapia psicológica es muy limitado o inexistente.

 

Vídeos

En algunas ocasiones, siempre con consentimiento previo por escrito y firmado, los/las terapeutas pueden optar por grabar la sesión. Esto se puede hacer, por ejemplo, en sesiones en las que se ensaya formas determinadas de actuar frente a una situación para que los/las pacientes tengan algo de feedback sobre su propia ejecución y puedan corregir las dificultades que aparezcan.

 

Conectividad 

Tener una buena conexión será necesario para poder realizar las sesiones, ya que, en el caso de tener una red con baja velocidad, puede hacer que se congele la imagen y dificultar la comunicación.

 

Comunicación no verbal

Cuando hacemos terapia online, será necesario tener una cámara para que el/la psicólogo/a pueda vernos y viceversa. Si nos podemos ver recíprocamente, la comunicación será más fluida y los/las profesionales, podremos adaptarnos a lo que la otra persona necesita aunque notemos que no es capaz de expresarlo.

 

Tiempo

Otra de las ventajas de la terapia online es el tiempo que requiere que, al no ser necesario un desplazamiento hacia la consulta de psicología, es menor. Con una sesión online, solamente perderás 5-10 minutos en encender tu ordenador o preparar la conexión, sin tener que invertir tiempo en ir y venir.

 

Precios 

Por último, una de las principales ventajas que puede tener la terapia online es que suele suponer un menor coste. El hecho de no tener que disponer de un local en el que ejercer su profesión, hace que los/las profesionales de la psicología puedan reducir los costes de las sesiones.

Esto siempre dependerá de la formación y necesidades de quien da el servicio, puesto que, en algunas ocasiones, el hacer terapia online requiere la adaptación de ciertos materiales y adquisición de programas informáticos específicos.

Además, en este caso se eliminaría el coste del desplazamiento a la consulta.

En conclusión, la terapia online tiene ventajas y desventajas, como en todos los casos. Si crees que las ventajas pueden ser mayores que las desventajas, elige esta opción.